lunes, 30 de junio de 2014

Qué te hacía feliz de niño?



Hace unos días estaba leyendo un artículo, no me acuerdo en qué medio ni exactamente sobre qué trataba, pero si recuerdo una pregunta que planteaba y que enseguida me hice: “cuántas cosas que te hacían feliz de niño, seguís haciendo de adulto?”.  Y el cuestionamiento seguía por el lado de el por qué vas dejando de hacer esas cosas, las vas guardando, olvidando…
Inmediatamente busqué en mi memoria qué me hacía muy feliz de chica, y me di cuenta que hace un par de años estoy volviendo o buscando hacer de nuevo esas cosas, como tratando de encontrar mi esencia : cantar, tocar la guitarra, hacer todo tipo de “artesanías”, sacar fotos, soñar mucho y despierta (si, si, lo confieso), viajar (no lo hacía tanto pero si soñaba mucho con eso), leer y transportarme a otras vidas…. Hay algunas bastante más banales, como reventar los globitos de los cobertores de nylon (no lo puedo evitar), tomar sopa haciendo mucho ruido, tirar todas las galletitas adentro del café, jugar al ring-raje…(me da vergüenza pero lo he hecho hace poco…)
 Esa búsqueda o vuelta a las cosas lindas de la infancia, recordar lo que sentía cuando las hacía de niña y darme cuenta que era alegría, felicidad, curiosidad, ese miedo lindo de no saber qué va a pasar con lo que estás por hacer. Todo eso tiene que ver con tener muchas ganas de tener una vida feliz, alegre, positiva, y darme cuenta que está en uno y simplemente en uno lograrlo, buceando en los sentimientos más sinceros y dejándolos salir.
No digo que sea la fórmula de la felicidad volver a ser niños, pero preguntarte: qué me hacía feliz en mi infancia?, recordarlo y por lo menos hacerse un lugarcito para volver a hacerlo y sentir lo mismo, creo que vale la pena.
Es un buen ejercicio para la semana, y estoy segura que habría muchas más sonrisas dando vueltas por ahí…..


Y estoy volviendo a cantar, feliz como cuando era chica...Foto hermosa sacada por Seba Ellena

martes, 17 de junio de 2014

Lo que siempre se ha sido


Post cortito, con letra y música. Y sigo sensible….



Nada más lindo que dejarse ser, aceptarse, sincerarse y disfrutar de lo que se siente, de lo que se sueña y de lo que se quiere, sin remordimientos.


Se es lo que se es
lo que siempre se ha sido
Se siente lo que se siente
en el centro del centro silente
tenga o no tenga evidente sentido

Y rara vez se es tal y como se quiere
se llora lo que se llora
uno no elige de quien se enamora
ni elige qué cosas a uno lo hieren

Y en lo más sutil de los cuerpos sutiles
lejos de la noria de causas y efectos
se tiene el corazón que se trae por defecto
así como Aquiles, por su talón, es Aquiles

domingo, 8 de junio de 2014

Me puse sensible....



Hoy no hay una historia pequeñita… No sé por qué estoy escribiendo esto, dudé en subir este post porque es muy personal, pero como es el espacio que me creé para decir o contar cosas, ahí va… Muchos me tratan de hipersensible, naif, bohemia… Ninguno de esos adjetivos me ofenden, no es eso, yo creo profundamente en que la mejor forma de relacionarse con todos y con todo es a través del amor. Y no hablo de “querer a todo el mundo por que si”,  de ofrecer la otra mejilla, no, no es eso, pasa por reconocer en los otros a personas que sienten, sufren, se ríen, sueñan, se enojan igual que uno. Cada vida es una realidad distinta, una historia distinta, sentimientos y motivaciones diferentes…imposible entonces juzgar las actitudes y reacciones de todos bajo la propia lupa.
Predisponerse para recibir algo bueno como primera actitud, y no cerrar los puños para devolver el golpe, ya es un cambio enorme. Cambia la reacción del otro, la predisposición a interactuar. Una sonrisa, un buen día con ganas, mirar a los ojos cuando alguien te habla, prestar atención al otro y no hacer que escuchás cuando en realidad seguís con tus cosas…
Creo en los cambios que empiezan por esas pequeñas cosas, esos pequeños gestos, la atención en el otro, el compartir realmente los momentos y no estar por estar, ir por simplemente ir a un lugar. Besos, abrazos y sonrisas que se comparten nunca van a estar demás.
Y sí….soy hipersensible, naif y bohemia….


No pude evitar sacar una foto de esta pared cuando la vi...y sí...es cursi...