martes, 25 de noviembre de 2014

En reforma interna



Si yo fuese yo parecía representar el mayor peligro de vivir, parecía la entrada nueva a lo desconocido. Sólo sabía que ya había empezado algo nuevo y nunca más podría volver a su dimensión antigua. Y sabía también que debía comenzar modestamente, para no desanimarse. Sabía que debía abandonar para siempre la ruta principal. Y entrar por el verdadero camino que eran los atajos estrechos”. EL LIBRO DE LOS PLACERES, Clarice Lispector.
Este post va de la mano con el anterior sobre la libertad : http://historiasporvale.blogspot.com.ar/2014/09/libertad-es-poco-lo-que-yo-quiero.html
Hacía unas semanas que no escribía, estaba justamente entrando en el camino de los atajos estrechos, saliendo de la ruta principal.
Parece tan obvio, pero tan difícil ser exactamente uno  mismo (o la versión más auténtica). Creo que cuando nos convertimos en adultos perdemos esa sinceridad de ser simplemente, sin prejuicios, ni preconceptos, ni conciencia de la mirada del otro. Perdemos el ser instintivo, el más ligado a los sentimientos , o por lo menos lo escuchamos poco.
Hoy elijo ser mi versión más auténtica, o por lo menos lo intento. Quién se anima?



No hay comentarios.:

Publicar un comentario